Las veces que intento entender acerca de la fidelidad de Dios para con nosotros, termino siempre sorprendido. No existe una prueba mayor de amor de Dios hacia su creación, que el sacrificio en un madero de Jesús. Caminar en esta dispensación de la gracia, es tener la certeza que pese a que vivimos los últimos tiempos, el Señor regresará por nosotros. No somos hijos abandonados a su suerte. Por más oscura que sea la noche, termines rodeado de lo que no esperaste y todo lo sientas turbio a tu lado, porque el dolor que experimentas es muy fuerte, MIRA LA INVISIBLE MANO DE DIOS CONTIGO, mostrando su fidelidad. Con Él siempre habrá salidas. Renuncia a todo dicho que hayas emitido, declarando lo contrario. Abraza la verdad de que pese a todo lo que personal, familiar, económica o politicamente viva nuestro país o el mundo, DIOS HA SIDO FIEL.
Las verdades y promesas de Dios nos sostienen en esos momentos difíciles en los que queremos tirar la toalla y nos sentimos fatigados espiritualmente. Cada vez me convenzo más, de que no merezco nada de lo que tengo y Dios me sigue sorprendiendo. Hoy te invito a poner tu mirada en esas verdades eternas y no permitas que tu ánimo fluctúe por las preocupaciones y situaciones que se han salido de tu control. Todo en esta vida es pasajero, pero en Dios está nuestra esperanza, porque él es ROCA ETERNA Y DIOS FIEL. Desde el lugar denso donde sientas que no ves nada, experimenta ahora el abrazo de amor de Dios, consolando y afirmando tu corazón. Eres un hijo, amado por un Dios eterno.
Recuerda que aunque todo acabe y perezca, no sucederá así con su fidelidad. Todo lo que él dijo que haría lo cumplirá porque él es fiel. Recuerda que Dios no ha terminado contigo. SUSCRÍBETE A ÉSTE BLOG y recibirás notificación, cada vez que suba una nueva entrada. Reenvía el enlace de ésta reflexión a tus amigos y familiares. Deja tu comentario al final del blog
Pr. José Ángel Castilla
Siempre con fe .
Después de un día tan cargado, abro este link y me encuentro con las palabras que hace un par de minutos le dije a mi Dios de camino y a punto de llorar. Las circunstancias me empujan a desfallecer y me he reusando mil veces a no soltar la mano de mi padre. Sólo puedo decir que en medio de mi desierto veo la fidelidad de Dios cada suspiro mío!!🙏