Bondad manifiesta

Cada generación celebrará las obras del Señor. Cuando David el salmista, escribió éste salmo de alabanza, esperaba que el pueblo de Dios se animara, los unos a los otros a no cesar de alabar al Señor. Los mayores en la fe, tenemos la responsabilidad de inspirar a las generaciones más jóvenes, a alabar y a nunca olvidar, los poderosos hechos de Dios en el pasado. Así mismo, como Dios se mueve con frescura en todas las generaciones, de los más tiernos veremos también, el fluir y el poder del Señor moverse, e inspirando también a los mayores a alabar y exaltar Su nombre.

Las alabanzas de Dios son muchas, y la vida del hombre es corta, y una generación sucede a otra: que relacionen las maravillosas obras de Dios entre sí, y así perpetúen sus alabanzas para toda la posteridad.

Trapp

Todos tenemos algo para contar. Una maravillosa historia, de la bondad del Señor para con nosotros. Cada día es hermoso, para meditar en la hermosura de la gloria de Dios. Él es tan bondadoso, que desborda de su compasión, en cada uno de sus hijos. ¿Cómo no habremos entonces de entonar una alabanza? Los hechos de Dios nos inspiran. Si amas a Jesús y le sigues, estás llamado a levantar una alabanza al único que la merece. Quien no tenga nada que decir respecto de la bondad del Señor, se le endureció el corazón o ha hecho de su relación con Dios, una religión y pura monotonía.

Pido que un nuevo y fresco sentir del amor de Dios abrace tu corazón y veas su bondad manifiesta en éste día. Cada vez que puedas, no te quedes callado y cuenta lo bueno que ha sido Dios en tu vida. Recuerda que Dios no ha terminado contigo. Suscríbete a este blog y recibirás notificación cada vez que suba una nueva entrada. Reenvía el enlace de ésta reflexión a tus amigos y familiares. Deja tu comentario al final del blog. Abrazo fraterno para todos y feliz fin de semana.

Pr. José Ángel Castilla