Escuché por mucho tiempo acerca de la ansiedad y leía acerca de ella, pero siempre la veía lejana a mi. Le oraba y pedía a Dios que nunca me permitiera experimentarla. Sólo cuando atravesé momentos difíciles e inesperados, entendí el significado en carne propia, lo que era la angustia y la ansiedad. Dedico éste mensaje a todos los lectores que están atravesando valles de sequía y de angustia emocional y espiritual. Quien se siente ansioso corre una carrera, en la que cada día, huye de su propia vida. Cuando el pánico se anida en nuestro pecho, tratamos de forma desesperada de escapar a un lugar seguro, que sentimos bastante fuera de nuestro alcance. A una mente preocupada le atraviesan preocupaciones a muy alta velocidad, que nos impide respirar normalmente. En éste punto viene el temor y crece exponencialmente en el corazón, causando indecisión y duda.
¿Qué situación te tiene angustiado? No le abras más la puerta de tu corazón al temor, creyendo que estás sólo en medio de las presiones constantes de la vida. Sean deudas, dineros retenidos que te adeudan hace tiempo, quizás tus hijos no hayas cómo disciplinarlos y te irrespetan o deshonran. Hay tantos momentos en los que podemos sentir esa opresión en el pecho, PERO es allí donde debemos levantar la mirada al cielo, RECONOCER que DIOS ES MÁS GRANDE QUE TUS PROBLEMAS. No te agobies sólo perdiendo la esperanza. Ora, adora y descansa en el Señor. Respira profundo y permite que el Espíritu Santo te infunda el aliento que necesitas para continuar. No vale la pena seguir viviendo en amargura de alma por lo que te quiere robar la paz y el gozo.
Perdona en medio de todo, a quienes te han faltado. Dios nos promete hacernos libres de la ansiedad por el poder de Su presencia. Agradece en todo tiempo y recuerda que Dios no ha terminado contigo. Suscríbete a éste blog y recibirás notificación cada vez que suba un nuevo artículo. Deja tu comentario al final del blog y comparte el enlace de éste mensaje con tus amigos y familiares. Abrazo fraterno para todos y feliz inicio de semana.
Pr. José Ángel Castilla
Amén gracias Dios Por tú fidelidad
Gracias Padre por estar en todo momento conmigo, porque en medio de la dificultad sustentas mi corazón con tu amor y tu paz.
Gracias, por compartir enseñanza, nunca me imagine pasar por una situación como es la depresión en verdad sólo el vive esa enfermedad puede describir lo difícil q es, pero Dios es bueno!!;Estoy sana para su gloria y honra🙏