Es increíble ver cómo Dios depositó de lo más preciado de su Gloria y poder, en simples y sencillas vasijas de barro. Sus dones, su amor, la salvación a través de Cristo Jesús, hoy habitan dentro de aquellos que le hemos rendido el corazón. Hoy nos alegramos mucho de tener un salvador, que lo dió todo por amor muriendo por nosotros en la cruz. De manera personal, valoro y admiro la sencillez y la nobleza en el corazón de las personas. Eso a mi juicio, son grandes referentes a seguir e imitar, porque modelan a Jesús de la manera correcta. Nunca el Señor vino a los suyos, a los judíos, ni a nosotros los gentiles de forma arrogante, orgullosa y tirana. Hoy le dedico esta entrada a todos aquellos que se esfuerzan en agradar a Dios, siendo vasijas de barro, y no buscan la vanagloria y el reconocimiento en todo momento.
Piensa por un momento y responde a las siguientes preguntas: ¿A quién estás inspirando en tu vida diaria? ¿En quién inviertes lo que has recibido de Dios?, ¿Qué has aprendido de los errores y aciertos que has tenido en la vida?, ¿Estarías dispuesto a dejarte quebrar por el Señor, para hacer de ti una vasija como mejor le plazca rehacerla a Él? Somos esos frágiles vasos de barro, moldeados a través de las pruebas. Pero dentro del corazón, contenemos un tesoro. Dios en vasijas imperfectas como tú y yo, decidió depositar Su Gloria. La humildad no va en la ropa, la forma como hablas o el lugar donde vives. La correcta y genuina humildad, proviene del corazón.
Dios escoge lo vil, lo menospreciado, lo desechado por el mundo para levantarlo y hacerlo notable para mostrar Su GLORIA. No necesitas ser un pastor para dejarte usar por Dios. Desde tu profesión u oficio, también eres un vaso y su contenido, (el amor de Dios) podrás derramarlo para inspirar, enseñar y saciar la sed espiritual de alguien. Recuerda que eres una vasija y que Dios aún no ha terminado contigo. Suscríbete a éste blog y recibirás notificación cada vez que suba un nuevo artículo. Bendice a tus amigos y familiares reenviando el link de esta reflexión. Abrazo fraterno para todos y feliz inicio de semana.
Pr. José Ángel Castilla
La apariencia de un vaso no es más importante que su contenido. En nuestro caso el contenido de nuestro vaso es el amor del Señor.
Dios no solo deposita su amor en nosotros como vasijas de barro, sino que nos moldea para sacar lo mejor de nosotros según su propósito, en mi proceso, su amor y fidelidad me han fortalecido en la fe. Gracias Pastor, bendigo su vida, y le pido a Dios que ilumine su mente y sea siempre su fuente de inspiración.
Gracias por tu comentario. Te bendigo. Dios sigue operando en nosotros. Su obra no se detiene.
Gracias pastor que Dios te siga utilizando a través de hermosa obra que realizas cada días por qué nos regalas palabras que ayudan edificar nuestras vidas te bendigo y que Dios te siga iluminando cada día
Bendiciones, Pastor, Jose Ángel! Enfoque no en el vaso perecedero sino en el contenido¡¡ EL PODER DE DIOS QUE ViVE EN NOSOTROS!!: El Señor, continúe dando sabiduría 🙏