Esperanza

Estar a la deriva, perdidos en el mar, vientos huracanados con amenaza de naufragio, vivieron el apóstol Pablo y cerca de 276 personas más, entre pasajeros y la tribulación de un barco en medio del mar mediterráneo. Todos habían perdido la esperanza de salvarse y veían muy cerca la muerte. ¿En qué situación de peligro te has visto amado lector? Qué momento tan adverso y difícil es perder toda la esperanza. Perder la esperanza y vivir sin ella, es haber sido derrotado antes de intentarlo. Cuando perdemos la esperanza, se nos esfuma la fe, el ánimo del corazón se debilita y empezamos a desconfiar en Dios. ¿Cuando fue la última vez que perdiste la esperanza? Zarpando desde Buenos Puertos, el viento se mostró favorable. Cuando pasaban por la isla de Creta, el viento huracanado y peligroso llamado Euroclidón, golpeó con fuerza. Todo marinero experimentado temía a estos vientos y pese al consejo de Pablo de no tomar ese rumbo, la tripulación se dejó llevar por su conocimiento, haciendo caso omiso a los consejos del apóstol. Quien no escucha y acata consejos, termina dejándose llevar y abandonandose al desastre, como le ocurrió a la tripulación de ésta nave.

Estando a mar abierto, sólo podían navegar con el sol o las estrellas. Fueron muchos los días que producto de la tormenta, llevaran a la tripulación, a sentir desesperación. La gran tempestad los llevo a ciegas hacia el oeste del mar mediterráneo. Quien pierde la esperanza coloca su confianza en el dinero, en las cosas materiales y ambos un día acabarán. Otros ponen su esperanza en la gente, y las personas nos fallan también. Y ni qué decir de los que esperan que la suerte los favorezca a través del azar o ganancias repentinas de falsas redes de mercadeo y pirámides, las cuales los terminaron estafando. NUESTRA ESPERANZA DEBE ESTAR ÚNICAMENTE PUESTA EN EL SEÑOR. Escucha consejos, no te dejes llevar por tu conocimiento y reconoce la sabiduría en la gente mayor, autoridades y renuncia a la soberbia que te impide aceptarlos. Espera en Dios y no te muevas ni a tu derecha o izquierda sin su clara dirección. Abrazate hoy a la genuina esperanza que nos ha dado el Señor en su Palabra, promesas y a través de la persona de Jesucristo. Recuerda que Dios no ha terminado contigo. Suscríbete a éste blog y recibirás notificación cada vez que suba un nuevo artículo. Comparte el enlace de éste mensaje con tus amigos y familiares. Abrazo fraterno para todos.

Pr. José Ángel Castilla

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2 comentarios en “Esperanza”

  1. David Araujo Anaya

    Lo recibo, gracias Pastor por esta mensaje alentador que me anima a tomar nuevas esperanzas, fe y esperar el tiempo de Dios en el cumplimiento de sus promesas en cada área de mi vida.

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