Nunca he contado las veces que la Biblia nos dice la frase: NO TEMAS. Algunos estudiosos dicen que son 360 veces que se repite en la escritura y se convierte para nosotros, en una hermosa promesa de parte de Dios. El hecho de que el Señor nos recuerde, que no sintamos temor en cada uno de los días del año, nos lleva a abrazar esta promesa y no soltarla nunca.
Hoy Dios te dice: No temas. Mañana vuelves a recibir la misma promesa y pasado mañana te sorprenderá con lo mismo. Por naturaleza sentimos temor ante situaciones intimidantes que nos paralizan y no nos dejan avanzar. Esa es la razón por la que necesitamos escuchar una voz contundente, que nos revista de fuerzas, confianza y paz como sólo Dios puede hacerlo.
El profeta Isaías en este pasaje nos indica que no debemos sentirnos desalentados, pues del Señor provendrá nuestra fuerza y nuestra ayuda en medio del turbión. La mano del Señor es poderosa y nos ha entregado la victoria.
¿A qué le tienes miedo en este tiempo?
Los leo en los comentarios. Una palabra malintencionada contra nosotros o a los seres que amamos nos intimida, un ser querido enfermo de gravedad en un hospital atemoriza, una mentira disfrazada de verdad para atacarte y robarte la paz, nos puede llenar de temor también. El ver disminuidos los ingresos nos puede intimidar porque vemos diezmada la capacidad para cubrir nuestro presupuesto. No debemos olvidar, que Dios no permitirá que seamos dañados o sigamos investidos, porque quien se mete o toca a un hijo de Dios, se mete con Dios mismo.
El Señor confunda los caminos de quienes puedan levantarse para destruirte. Serán como nada y caerán destruidos todos los que quieran hacerte la guerra. Renuncia al temor en el nombre de Jesús. Recuerda que tu defensor no ha terminado contigo y te ama con amor eterno. Suscríbete a este blog y recibirás notificación cada vez que suba una nueva entrada. Bendice a tus amigos y familiares reenviando el link de ésta reflexión.
Abrazo fraterno para todos.
Pr. José Ángel Castilla