Todos los días de nuestro caminar en el Señor, serán de aprendizaje y entrenamiento. Nuestro maestro y guia tiene todas las herramientas para hacerlo: SEREMOS ALENTADOS cuando sintamos fatiga y cansancio. LA CORRECCIÓN también será parte del proceso, cuando intentemos salirnos del camino correcto.
Jesús siendo un niño aún, crecía en gracia y sabiduría delante del Padre, pero también delante de todos los que lo veían y conocían. Debía tener alrededor de doce años cuando fue llevado a Jerusalén a celebrar la pascua, que era una de las tres fiestas más importantes, en las que se peregrinaba y celebraba en la Santa ciudad.