INTIMIDAR: es hacer que alguien sienta miedo o temor. Es amenazar a alguien.

Vivimos momentos no fáciles. Tenemos toda la fe y la esperanza de sentirnos guardados por el Señor. Todos los días libramos batallas internas contra nuestros propios miedos. De esta manera no permitímos que el temor se agigante en nosotros. ¿A que le tienes miedo en este tiempo?

El temor es una raíz profunda que crece en nuestro interior. Busca controlarnos y que salgamos corriendo. Así le sucedió al gran profeta Elías. Una mujer lo amenazó, era poderosa y malvada. Ella fue Jezabel, quien espiritualmente representa domínio, control y temor.

No tengas temor al futuro ni a nada que anule lo que nos enseña la escritura. El Espíritu que el Señor nos dio es de poder, amor y de dominio propio. Por esto no podemos renunciar a la autoridad que Dios nos ha dado. Su nombre, su sangre y su palabra nos revisten para enfrentar cualquier ataque, porque son nuestras saetas. Asume la autoridad que tenemos de parte del Señor.

No te detengas por temor. Se audaz, emprende sin miedo a correr riesgos. Dios está contigo. El será tu garantía y tú respaldo. Sólo no estás. Te invito a ver la enseñanza completa del programa Directo al corazón, todos los martes y jueves a las 6pm.

Recuerda que Dios no ha terminado contigo. Suscribete a este blog y recibirás notificación cada vez que suba un nuevo artículo. Comenta y comparte con otros amigos y familiares. Abrazo fraterno.

Dios te bendiga

Pr. José Ángel Castilla